Hoy alcanzamos una meta muy especial para el país. En 21 años, desde que inició el Programa de Incentivos Económicos del Canal de Panamá (PIEA), unos cinco millones de árboles han sido sembrados en áreas pertenecientes a la Cuenca. Esta cifra es de gran significado y simbolismo porque representa un plantón por cada panameño, principalmente, con el propósito de proteger el ambiente y, en consecuencia, el recurso hídrico.
Con la siembra de este “árbol cinco millones”, de la especie Jacaranda caucana que crecerá en las cercanías del Edificio de la Administración del Canal, se logra un hito extraordinario que, en palabras del administrador Ricaurte Vásquez Morales, “ha sido posible gracias al respaldo y pasión que brindan y transmiten los moradores de las comunidades de esta área, y al gran trabajo y compromiso de los especialistas canaleros que los asesoran”.
Reconociendo que el desarrollo sostenible se fundamenta en tres pilares: social, económico y ambiental, en estas áreas se busca mejorar los sistemas productivos, transmitir nuevos conocimientos y potenciar las condiciones socioeconómicas de los beneficiarios, a la vez que se protegen los suelos y el recurso hídrico. En este sentido, el PIEA ha permitido la reforestación de 10,846 hectáreas, atendiendo a la responsabilidad constitucional que tiene el Canal sobre la administración, mantenimiento, uso y conservación del recurso hídrico.
Del total de hectáreas reforestadas, 3,650 corresponden a la modalidad de agroforestería (café, cacao y frutales) y 4,776 a la silvopastoril (fincas ganaderas). Es importante destacar que todo este esfuerzo se realizó en las fincas de productores ubicadas en regiones estratégicas de la cuenca del Canal, en su mayoría rurales. Las 2,420 hectáreas restantes, se han incluido las modalidades de reforestación para conservación y comercial, además de enriquecimiento de matorrales para establecer nuevas plantaciones forestales, principalmente dentro de parques nacionales, cursos de ríos, áreas patrimoniales del Canal y zonas estratégicas.
La participación comunitaria ha sido clave y, desde el año 2020, las comunidades organizadas se han encargado de proveer los plantones para el PIEA, produciendo a la fecha 367,000 plantones, lo que se traduce en una generación de ingresos que ronda los B/. 220,000.
Los programas que se implementan incluyen la participación e involucramiento comunitario, y tienen el objetivo primario de potenciar el desarrollo sostenible de la cuenca del Canal y proteger el recurso hídrico, mediante el uso adecuado de la tierra, el perfeccionamiento de las técnicas agropecuarias y la mejora de los ingresos de los beneficiarios, a través del apoyo al mejoramiento de procesos postcosecha y el apoyo a la comercialización de productos agropecuarios.
Un ejemplo de ello se puede apreciar en la pasada zafra, cuando los caficultores de esta región vendieron unos 14,000 quintales de café, luego de capacitarse mediante los programas del Canal y con el uso de nuevas tecnologías.
Para el Canal de Panamá las comunidades de la Cuenca son un actor fundamental en la conservación del agua porque, como aliados, comparten la tarea de cuidar el entorno donde se ubica el recurso hídrico para garantizar el agua para los usos locales en sus comunidades y su disponibilidad para el consumo del 55 % de la población del país y la operación de la vía.